Sobre precios de un cafe y sueldos de politicos
El 27 de marzo del presente año TVE estrenó con gran éxito un nuevo formato de programa —dirigido por Lorenzo Milá e importado de Francia— que en principio iba a tener esa única emisión, pero que debido a la gran acogida por los teleespectadores decidió repetir un mes más tarde.
Como os habréis dado cuenta se trata de Tengo una pregunta para usted... en el que el público lo forman un centenar de ciudadanos escogidos por TNS Demoscopia cuidadosamente para representar de una forma equilibrada y significativa al conjunto de los españoles. De esta forma, entre ellos había ciudadanos de todas las Comunidades Autónomas, desde parados a funcionarios pasando por prejubilados, amas de casa, estudiantes, autónomos o currantes de todo tipo. Del mismo modo había disminuídos físicos e inmigrantes de diversas procedencias. Incluso se tiene en cuenta la afinidad política de
El sistema, bastante interesante y con grandes posibilidades, consiste en que cada espectador realiza una pregunta al entrevistado, que se dedica a contestarla como buenamente puede.
Resulta interesante, digo, porque hasta ahora va enfocado a las principales figuras políticas de la España actual; de modo que podemos ver, en directo y sin asesores preparando discursos, como se defienden nuestros gobernantes ante preguntas de candente actualidad; pudiendo por fin responder a laos temas que realmente le importan al ciudadano de a pié y no todas esas absurdas ideas abstractas a las que suelen dedicar la practica totalidad de los debates que entre ellos mantienen —véase naciones y nacionalidades, quién cede más ante los terroristas, quién dice más la verdad sobre el 11-M, etcétera—.
El primer entrevistado, el Presidente del Gobierno José Luis Rodriguez Zapatero, respondió a 42 preguntas de los 39 ciudadanos que tuvieron tiempo de formularlas, sobre muy diversos temas de actualidad.
En un ambiente distendido, en el que hubo tiempo tanto para los reproches como para el buen humor, fueron surgiendo muy diversos temas, si bien el terrorismo y la negociación con ETA, por un lado, y la situación económica y laboral, por otro, fueron los asuntos más recurrentes.Casi un mes más tarde, el siguiente invitado fue el líder de la oposición Mariano Rajoy, que respondió a unas 70 preguntas de otros 39 invitados.
Otros temas destacados fueron el acceso a la vivienda -planteado principalmente por los más jóvenes-, los derechos de los inmigrantes -3 ciudadanos procedentes de Serbia, la República de Congo y Ucrania intervinieron en el programa-, la situación del mundo rural y la educación y sanidad.
Una vez más surgieron un buen número de temas; si bien en este caso muchas de las preguntas se centraron en el terreno estrictamente político y en las relaciones entre el Gobierno y la Oposición en el escenario actual; los ciudadanos preguntaron a Mariano Rajoy sobre la gestión del Gobierno del PP en relación, principalmente, con el 11-M y la guerra de Iraq, así como también sobre su actual estrategia de oposición respecto a las decisiones y medidas adoptadas por el Gobierno socialista, sobre todo en materia de terrorismo.
Otras preguntas recurrentes fueron las relacionadas con las medidas políticas, sociales y económicas que adoptaría Mariano Rajoy en el hipotético caso de convertirse en el próximo Presidente del Gobierno.
Entre el resto de temas tratados también estuvieron los relacionados con la Educación, Urbanismo y Medio Ambiente, el Estatuto de Cataluña, la Ley electoral y la de matrimonios homosexuales y la inmigración.
Pese al amplio espectro de preguntas y temas importantes tratados, lo único que recuerda todo el mundo es que Zapatero pensaba que un café en un bar cuesta 80 céntimos y que Rajoy no se atrevió a desvelar su sueldo a una pensionista. Lo cual me parece increiblemente lamentable y da una idea bastante clara del tipo de gente que desgraciadamente puebla este país.
Aún este fin de semana, en uno de los mitines dados por el PP continuaron dándole bombo a la pensionista —con la que días después del programa comió y discutieron sobre la política nacional.
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